Pérez Llorca

El recién elegido presidente de la Generalitat Valenciana Juan Francisco Pérez Llorca (Finestrat, Alicante, 1976) es más conocido y tratado como Juanfran. Le gusta, pues transmite cercanía y sencillez, como sucede con Juanma Moreno en Andalucía. Además, tener como primer apellido Pérez no facilita la alusión directa por escrito o de palabra, y el segundo apellido aislado no convence. Escucharemos y leeremos muchas veces “Juanfran”, no aludiendo al futbolista, sino al nuevo president valenciano.

Se insiste hasta la saciedad, sobre todo por los socialistas valencianos y por Compromís, que llega al cargo hipotecado por Carlos Mazón y por haber cedido a todas las exigencias de Vox, para intentar quitarle desde el primer minuto el sosiego de gobernar con criterio y estilo propio.

Evidentemente, de total confianza de Carlos Mazón: secretario general del PP de la Comunidad Valenciana y portavoz del Grupo Popular en las Cortes Valencianas. Como portavoz ya tiene sustituto, Fernando Pastor, otro alicantino; como secretario o secretaria general, todavía no cuando escribo estas líneas, aunque me llegan rumores de que puede ser una mujer muy relevante en Castellón, también por no aglutinar en exceso los cargos en alicantinos, por aquello de vertebrar las tres provincias.

Que Juanfran haya gozado de la confianza plena de Mazón no equivale a descalificarle para su nuevo cargo, con los votos del PP y de Vox, y pese a que PSPV y Compromís hayan reiterado su petición de que dimita todo el Consell por la gestión de la DANA y haya elecciones anticipadas.

Dentro de año y medio toca celebrar elecciones autonómicas en tierras valencianas. No hay que descartar que Juanfran sea el candidato, y no sea un mero president temporal o “sustituto de”. No tiene una presencia física tipo Alain Delon o Brad Pitt, pero por esa vía habría que descartar a muchos, y la política no es cine, aunque lo parece a veces.

Sin embargo, su agilidad parlamentaria mostrada estos años, su capacidad de llegar a acuerdos, su tranquilidad, son un activo indudable. Sobre todo, las crecientes mayorías absolutas que ha cosechado en Finestrat para ser alcalde diez años no hay que perderlas de vista, así como la opinión de los vecinos. Es muy distinto ser alcalde que president –y sobre todo en momentos tan difíciles como los actuales-, pero son datos relevantes.

Ha sonado el nombre de María José Catalá, la alcaldesa de Valencia, por ser la opción preferida por Génova, para presidir la Generalitat. Catalá quiere seguir siendo alcaldesa de Valencia. Si Juanfran demuestra ahora eficacia y tirón, Catalá seguirá en 2027 como alcaldesa. Pero año y medio en política es una eternidad.

Juanfran tiene un plan propio, no de “sustituto”. Cambios de consellers, 200 altos cargos pendientes, núcleo duro de Presidencia que con seguridad sufrirá muchos cambios. Ha de hacer cambios de imagen, y sobe todo llevar a cabo acciones de gobierno con rapidez y entidad propia.

  • Javier Arnal Agustí es Licenciado en Derecho y periodista.
    Escribe, también, en su web personal.