Residencias olvidadas
La Residencia de mayores El Pinar, de Castellón, ha adornado y preparado con cariño la celebración de las fiestas de Navidad y Reyes. Como en la de El Pinar, se agradece ese calor de hogar también presente en otras residencias. Sin embargo, la Consellería sigue sin licitar la gestión de las residencias públicas concertadas como El Pinar, pese a la promesa en abril pasado de la consellera de Servicios Sociales, Susana Camarero.
Supone un enriquecimiento injusto por parte de la Consellería, que perjudica a los trabajadores, usuarios y familias, que sufren el olvido reiterado, que se traduce en unos salarios congelados desde hace años, unas ratios empleados-usuarios anquilosadas, y que provoca que las trabajadoras –la gran mayoría son mujeres– se vayan a otros centros de mayores con mejor remuneración. No oigo las quejas de las feministas.