LA VIDA SIGUE
Después de un paréntesis de dos semanas en que la tragedia de la DANA y la irrupción de Trump de nuevo en la política monopolizaron todos los informativos, es inevitable que los graves asuntos que estos dos hechos interrumpieron, vayan reapareciendo en la vida del país.
Trump seguirá dando mucho juego durante los próximos cuatro años y la tragedia de Valencia tardará lustros en verse corregida, por el momento los partidos luchan por vencer el relato y como suele suceder la izquierda está ganando el pulso.
Mazón se ha convertido en el malo de esta historia. Empezó a fragilizar su figura en su encuentro bilateral con Sánchez ingenuamente entusiasta -recuerden ustedes, la devolución de La dama de Elche y toda aquella lista de peticiones-, siguió encontrándose muy próximo al presidente en el primer encuentro tras el 29-O y luego intentó virar responsabilizando al gobierno central de inacción y demora. Vaciló entre Sánchez y Feijóo y el resultado fue la manifestación de ayer en que se le llamaba asesino y se pedía su encarcelamiento.