Vivimos tiempos convulsos. El pasado día 4 de este mismo mes se ganó el dudoso título de Lunes Negro. Recordemos que en él se inició el proceso contra el Fiscal General; Mazón presentó su dimisión; Maribel Vilaplana, coprotagonista del largo almuerzo de El Ventorro compareció ante la jueza de Catarroja; comenzaron los proceso contra Ábalos y Koldo y también se asentaron las sospechas sobre el ministro Víctor Torres.
El jueves día 20, podría llevarse con todos los méritos el título de Jueves de Infarto. No solo la izquierda celebraba con indisimulado entusiasmo el aniversario de la muerte de Franco, sino que por sospechosa coincidencia se emitió fallo condenatorio sobre el Fiscal General del Estado, un hecho insólito en España y en Europa que ha caído como una bomba sobre los aledaños del gobierno y como una bendición entre la oposición.
Por cinco votos contra dos, el Supremo condenó al Fiscal General a dos años de inhabilitación, 7.200 Euros de multa y una indemnización a Amador de 10.000 Euros. Todo muy moderado pero suficiente para dejar bien claro quien obró bien y quien lo hizo mal.
Ello no quiere decir que el novio de Ayuso vaya a salir indemne; no duden que también tendrá que hacer frente a multas y que éstas serán de mucha mayor envergadura.
Por el momento, una decena de miembros del Gobierno han repetido miméticamente con su Presidente desacuerdos con la decisión del Supremo y con la politización de la Justicia. Las opiniones son tanto más radicales en boca de Sumar, ERC, PNV, Podemos y PNV insistiendo todos ellos en que, a ojos de la justicia, la que ha quedado como intocable es la Señora Ayuso.
Tras esta desconfianza en el Poder Judicial y los consiguientes insultos, cualquier próximo paso de parte del Gobierno es posible... Podrá cuestionar la sentencia una vez se produzca, puede elevarla al Tribunal Constitucional donde cuenta con el comodín Pumpido y en todo caso puede indultar a Ortiz con lo que podría continuar con su carrera fiscal, aunque no al nivel supremo para el que ya se busca a la persona idónea para el puesto. Confiemos se trate de alguien de mayor talla que Ortiz que, recordémoslo, había sido como una especie de suplente de Dolores Delgado.
Sorprende que el sanchismo mantenga un relato basado en que quien ha confesado ser culpable de evasión tributaria -González Amador- salga indemne del proceso y por el contrario la pena haya recaído en el Fiscal General Ortiz, sin pruebas tan solo con indicios en el Fiscal General Ortiz quien, por lo tanto, era claramente inocente. Lo que no comprende esta izquierda es que quien estaba siendo juzgado no era Amador sino Ortiz, por el grave cargo de desvelar los secretos que estaba obligado a custodiar.
Evasiones fiscales se producen miles cada año, suelen pasar desapercibidas, sin juicio, con sanciones económicas, a menos que el evasor sea la pareja de la presidenta de Madrid, una enemiga política a abatir por orden de Sánchez a su Fiscal General. En su momento, como ha quedado dicho, conoceremos la decisión de la agencia tributaria al respecto.
La semana avanzaba de forma dramática pero afortunadamente el viernes nos dio un gran respiro. En el Palacio Real, sus Majestades los Reyes acompañados por algunos políticos del PSOE, el PP y PNV, así como por los presidentes de las Instituciones del Estado -con ausencias muy significadas- celebraron el 50 Aniversario de la Restauración Monárquica en la figura de Don Juan Carlos I, gran ausente del evento pero quien fue ensalzado por su hijo Felipe VI y también honrado con la concesión del Toisón de Oro a su esposa la Reina Sofía.
En el coloquio sobre el papel de la Corona en la Transición, desarrollado a continuación, se dieron algunos consejos que sin duda serán útiles para el Rey y aún más para la Princesa Leonor.
No duden que la celebración monárquica encontrará todo tipo de reacciones y muchas de ellas poco amables. Personalmente pienso que España puede sentirse afortunada de contar con esta Monarquía, con los dos titulares habidos hasta ahora y con el prometedor futuro de la Princesa Leonor.
Imágenes: IFEMA Madrid, Fundación Hay Derecho
Jorge Fuentes Monzonís-Vilallonga es Master en Ciencias Políticas y Económicas y Derecho.
Diploma de Altos Estudios Internacionales. Embajador de España en Bulgaria en 1993.
Primer Embajador de España en Macedonia en 1995.
Embajador de España en Bruselas WEU en 1997, entre otros cargos.
