Marlaska en la diana
La muerte de dos guardias civiles en Barbate, embestidos brutalmente por la lancha de narcotraficantes que pretendían detener con una zodiac, se pudo evitar, si hubiera unos medios proporcionados para luchar contra el narcotráfico. La zodiac era hasta ridícula para esa misión, solo posible por el sentido del deber, disciplina y valor de los guardias.
Pero el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, hizo justo lo contrario hace 16 meses: suprimir la unidad especializada en la costa gaditana. Tras el asesinato de los dos guardias civiles y ante la abrumadora petición de que dimita, Marlaska se ha limitado a admitir que el Campo de Gibraltar es “casi” una Zona de Especial Singularidad, y que “casi de facto” tiene esa consideración.