JMJ en Lisboa

Desde ayer y hasta el 6 de agosto, se celebra en Lisboa la Jornada Mundial de la Juventud con el Papa Francisco. Es una iniciativa que puso en marcha con periodicidad bianual o trianual Juan Pablo II, hoy San Juan Pablo II en 1986 (Roma).  Tiene mucho que ver con la proclamación, por parte de la ONU, del Año Internacional de la Juventud, en 1985. La cifra no ha dejado de aumentar en las JMJ, con muchos jóvenes que “repiten” y otros muchos que acuden atraídos por lo que ven y escuchan en los medios de comunicación, en su diócesis, en la parroquia o en boca de algunos conocidos y amigos. De todas las JMJ la más numerosa fue la de Manila (1995) con cinco millones de asistentes. España fue el primer país en acoger dos JMJ, Santiago de Compostela (1989) y Madrid (2011): para pensar, pues ciertos calendarios son significativos.

El Papa Juan Pablo II fue calificado como el “Papa de los jóvenes”, por esta y otras iniciativas. El pontífice conectaba muy bien con los jóvenes, por su estilo directo, jovial, optimista, con una vida personal acostumbrada a superar dificultades, como cada joven conviene que asuma, pues en la vida nada se consigue fácil.

Quiero destacar ese detalle: la ONU declara el Año Internacional de la Juventud, y el Papa quiso que la Iglesia aportara su doctrina, su mensaje, a los jóvenes. Eso mismo sucedió con las familias: la ONU declaró en 1994 el Año Internacional de la Familia, y Juan Pablo II comenzó los Encuentros Mundiales de las Familias, con el mismo fin de que la iglesia no se quedara al margen de ese apoyo y esfuerzo. Entonces y ahora, hay quienes pretender relegar la Iglesia a lo privado, que los católicos no trasladen su fe a calles y celebraciones, con el falso argumento de no violentar a los no-católicos: asombroso, pero siguen pensando así algunos, en España y en nuestra cultura actual.

La JMJ de Lisboa ya ha empezado. De España, unos  80.000, 70 obispos y 1.000 sacerdotes. Estos días se han ido preparando cientos de jóvenes de la diócesis de Segorbe-Castellón, como los 25 que han ido desde Benicàssim. Hay jóvenes que optan por festivales musicales veraniegos, y también hay jóvenes que optan por un encuentro espiritual y festivo en Lisboa. Muchos o pocos, al menos sirve para hablar de los jóvenes con propiedad, variedad y comprensión. Los jóvenes acuden, sobre todo, para profundizar en la fe católica y prepararse para difundirla en su ámbito, sin complejos: el logo de la JMJ sugiere a los jóvenes a no conformarse y ser protagonistas. También son “noticia”, parte importante de la vida mundial en agosto 2023. Jóvenes y fe son noticia.

 

  • Javier Arnal Agustí es Licenciado en Derecho y periodista.
    Escribe, también, en su web personal.